- EL DR. JECKYLL DICE:
Menos mal que hay productores con ojo que, de vez en cuando, la dan la posibilidad a un director de realizar una nueva película, con independencia de que su anterior propuesta no haya contado con el favor del público mayoritario. En el caso de "Los ojos de Julia", el productor avispado es el también realizador mejicano Guillermo del Toro, y el director afortunado Guillem Morales, que debutó en 2005 con la más que recomendable "El habitante incierto".
"Los ojos de Julia" comienza de forma harto intrigante: una mujer ciega se suicida y su hermana gemela Julia (Belén Rueda), de la que llevaba unos años distanciada, al acudir al entierro, comienza ver indicios de algo que le hace sospechar del aparente suicidio de su hermana. Lo que añade originalidad y grandes dosis de tensión al argumento es que tanto Julia como su hermana fallecida sufren una enfermedad degenerativa cuyo irremediable final consiste en la ceguera total.
Es precisamente en este mundo de la ceguera del protagonista, donde la historia aporta las mayores dosis de suspense. Si bien la primera parte de la película se centra en las pesquisas de la protagonista por seguir las pistas que parecen revelarle que su hermana no se ha suicidado sino que la han asesinado, la segunda mitad del relato se centra el en terror basado en la impotencia de la protagonista para escapar de la ratonera en la que se ha metido al no poder servirse de su vista.
"Los ojos de Julia" tiene momentos escalofriantes, como la secuencia en que Belén Rueda se mete, sin saberlo, en un vestuario de mujeres ciegas, o como cuando cierto personaje decide comprobar si, en efecto, Julia ha perdido la vista o aún puede ver (sin más comentarios acerca de este último momento). Desde luego, Guillem Morales ha exprimido al máximo una historia con gancho que atrapa al espectador desde su comienzo, obligándole a no apartar los ojos en la pantalla aún en los instantes más terroríficos.
El único punto débil de la cinta, posiblemente, sea consecuencia de ese afán por querer dar más de lo que la historia permite. Y prueba de ello es la forma innecesaria en que se alarga el tercio final de la película (el más flojo, dicho sea de paso), en que el personaje de la vecina de la protagonista (Julia Gutiérrez-Caba), también ciega, acaba jugando un papel decisivo, o ese epílogo que cae en la cursilería más evidente con el plano final que cierra la historia.
De todas formas, esto no desmerece el interés suscitado por "Los ojos de Julia". Al contrario, ojala el cine patrio fuera capaz de ofrecer al espectador películas como ésta, en que el interés se genera desde el mismo momento en que se apagan las luces. En lo que concierne a la interpretación de Belén Rueda, pues qué decir, aparte de que borda una vez más su personaje. Por mi parte, nada más que recomendarle que si acuden a su videoclub y la ven disponible, y quieren pasar en tensión un rato, no duden en alquilarla. Y, si son un poco miedicas, procuren verla en compañía de alguien (y con alguna luz encendida, por si acaso).
- MR. HYDE DICE:
Pues sí, coincido con Jeckyll, si el cine español fuera capaz de hacer pelis como ésta más a menudo, no habría ni crisis ni leches. Porque mira que somos capaces de hacer mierdas como pianos.
"Los ojos de Julia", de todas formas, tampoco es que sea el no va más del cine español, aunque también es verdad que comparándola con otras patatas más gordas que se han hecho, pues se agradece que al menos haya alguien que te cuente algo interesante. Y, si de paso, está bien hecho y gusta al público pues mejor que mejor.
Esta peli es intrigante como pocas. Además, por suerte, no cae en el recurso fácil de sacar ni fantasmas, ni muertos vivientes, o espíritus que acaben siendo los malos de la función. Casi todo lo que sucede en la peli puede pasarle a cualquiera, sin coñas sobrenaturales de ningún tipo. Eso sí, es obvio que se toman alguna que otra licencia para hacer la cosa más espectacular, y que hay escenas que te hacen fruncir el ojo ciego a cascoporro (el que no se haya estremecido con lo que le ocurre al personaje de la vieja en el ojo, no tiene sangre en las venas).
Pero todo esto hace que "Los ojos de Julia" sea una película entretenidísima y que, sin ser la típica peli esa de terror en la que todos los sustos consisten en que suena la música con un "tachán" a toda paleta para que el público salte del asiento, acaba resultando un espectáculo inquietante y muy recomendable.
Y quien sea un poco caguetas, podrá superarlo, que no es de esas en que la sangre parece que sale con grifo. De hecho, si no me equivoco, creo que en esta peli, sangre poca. Así que ya sabéis, a pasarlo pipa se ha dicho, que además la peli es española.
'Los ojos de Julia' - Tráiler definitivo español por elseptimoarte