jueves, 30 de junio de 2011

CINE ACTUAL: "INDIANA JONES Y EL REINO DE LA CALAVERA DE CRISTAL"


TÍTULO: INDIANA JONES Y EL REINO DE LA CALAVERA DE CRISTAL

DIRECTOR: STEVEN SPIELBERG

REPARTO: HARRISON FORD, CATE BLANCHETT, SHIA LABEOUF, KAREN ALLEN, RAY WINSTONE

DURACIÓN: 125 min.

AÑO: 2008

GÉNERO: AVENTURAS

  • EL DR. JECKYLL DICE:

Nada más y nada menos que diecinueve años ha tardado en llegar a las carteleras la cuarta aventura del arqueólogo más famoso de la historia del cine. Tras un rifi-rafe incesante de negociaciones, revisiones de guiones, planes de rodaje y Dios sabe qué más contratiempos, por fin se volvió a reunir de nuevo el mismo equipo que se había encargado de las anteriores entregas de Indiana Jones: el todopoderoso George Lucas como productor, el no menos poderoso Steven Spielberg como director, y Harrison Ford como el personaje al que debe la práctica totalidad de su carrera cinematográfica. Desde luego, el listón lo tenía bien alto después de tres entregas anteriores estupendas, divertidas y muy bien realizadas, por lo que "Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal" lo tenía complicado para situarse a la misma altura. ¿Lo consiguió? Pues sí y no. Me explico después de resumir brevemente su argumento.


El Dr. Jones (Ford) es un profesor de arqueología retirado de las aventuras que antaño le habían llevado a participar en misiones increíbles. Secuestrado por un grupo de espías rusos en pleno comienzo de la Guerra Fría, liderados por al malvada Irina Spalko (Blanchett), es obligado a localizar un misterioso objeto: una calavera de cristal, cuyos aparentes poderes pueden cambiar el mundo tal y como lo conocemos. Tras librarse de sus captores, Jones regresa a casa, donde conoce a un joven muchacho llamado Mutt (Labeouf), quien le pide ayuda para resolver la desaparición de su madre (Allen), vieja amiga de Jones, y cuyo aparente secuestro parece estar ligado con la existencia de esta calavera de cristal.


"Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal" sí que consiguió un auténtico logro en la taquilla. Sólo en el mercado nacional acabó casi duplicando los ya jugosos ingresos de "Indiana Jones y la última cruzada - Indiana Jones and the last crusade, 1989", con más de trescientos millones de dólares, y otro pico igual de importante en el resto del mundo. Lo que significa que la inversión que se hizo en su producción acabó más que satisfaciendo a sus responsables.


Ahora, bien, en lo que a la calidad de la cinta se refiere, eso ya es otro cantar. Desgraciadamente, esta cuarta parte acaba yendo por unos derroteros que no tienen nada que ver con el espíritu de las otras entregas. No sólo porque esté repleta de secuencias sin sentido y, hasta cierto punto, absurdas: el comienzo es de lo más lioso, con esa huida de no se sabe muy bien qué en un monumental almacén; uno de los personajes principales pasa de ser un colaborador de los villanos con la misma facilidad que a ser un agente de la CIA; y en el tercio final de la película, decenas de tribus salvajes acaban persiguiendo a los protagonistas sin que el espectador sepa muy bien por qué. Todo ello, por no hablar de su absurdo final, algo insólito que casi ningún admirador incondicional de las aventuras del Dr. Jones habría esperado ver en una película como ésta.


Es una verdadera pena que Spielberg y compañía se hayan creído capaces de tomar el pelo al público, dando por hecho que, por el simple hecho de estrenar una película que, de entrada, cuenta con una altísima reputación, los espectadores van a ser tan simples como para aceptar cualquier cosa que se les proponga. Este es el claro ejemplo de que no es así, y de que, en ocasiones, sería más conveniente, antes de tener la desfachatez de presentar un largometraje así, mejor no hacer nada, y dejar que los seguidores fieles de las otras entregas se queden con el agradable gusto que les dejaron aquellas. Lo dicho, una pérdida de tiempo y dinero. No merece la pena en absoluto. Una lástima, sobretodo pensando en lo que pudo haber sido y no fue.



  • MR. HYDE DICE:

¡¡Menuda mieeeeeeeeerda de película!! Ostras tú, lo difícil que era cagar una serie de peliculones como eran los de Indiana Jones. Pues el amigo Spielberg lo ha logrado con creces. La madre que lo parió, cómo puede ser que alguien con su filmografía y capacidad para hacer auténticas obras de arte haya metido la pata de ese modo. Y no porque esté mal hecha ni nada de eso, sino porque al primo que le escribió el guión deberían condenarlo a alejarse de por vida a más de cincuenta kilómetros de un estudio. Y no os penséis que destrozo la cuarta parte de "Indi" porque sí, que ahora mismo os cuento el por qué.


La historia no hay por dónde cogerla. Vale que en la primera parte el tío encuentra el arca de la alianza; vale que en la segunda parte se ve cómo se puede sacar un corazón mientras la víctima sigue viva, y que los vagones de una mina se pueden convertir en una montaña rusa: y vale que en la tercera parte encuentre el Sagrado Cáliz y casi resucite a su padre. Pero es que lo de la cuarta ya es de traca. ¿Que el mejor remedio para escapar de una muerte segura a causa de una bomba nuclear es un nevera de los años 50? Bueno, me lo creo. ¿Qué un chaval saltando de liana en liana como un mono puede ir más rápido que los malos en un jeep a toda paleta? Mmmmm... bueee, vaaale, acepto pulpo. ¿Que te tiras por las cataratas del Iguazú en una mierda de coche y ni te despeinas? Pffff, va, también cuela. Pero vamos, eso de que Indiana Jones acabe con los ET's de por medio, con platillo volante y todo incluido, ya es para cagarse.


Lo que no entiendo es cómo, después de años y años dándole vueltas a los guiones, éste es el único que acabó gustando a George Lucas, Spielberg y Harrison Ford. ¡Joer macho, cómo serían los otros! En serio, no sé qué tipo de hierba rara se fumaron los amiguetes, pero desde luego que no les sentó nada bien. Además, es que el resto ya da hasta pena. En primer lugar, Harrison Ford está ya para hacer de Indiana Jones y el misterio del jeriátrico maldito; en segundo lugar el que hace de hijo (el pavo de "Transformers") está más perdido que un cura en una discoteca; y la pobre Cate Blanchett, que es lo más salvable de la película, no se cree ni por un momento el papel -de hecho, da la sensación de estar pensando: "hay que joderse, lo que tiene que hacer una con tal de trabajar con Spielberg"-.


En resumen, si os gustaron las tres primeras partes, que son de lo mejor que se ha hecho en muchísimo tiempo en lo que al cine de aventuras se refiere, tomaréis una buena decisión si hacéis como que esta cuarta parte nunca se hizo. Y lo peor es que acabó recaudando una fortuna más que las otras. ¡Buah, pa jiñarse! Vamos, que no me pongo un punto, en lugar de una estrella, porque no tengo el dibujito, que si no, no lo libra ni su madre.