DIRECTOR: DANIEL ESPINOSA
REPARTO: DENZEL WASHINGTON, RYAN REYNOLDS, VERA FARMIGA, BRENDAN GLEESON, SAM SHEPARD, ROBERT PATRICK, NORA ARNEZEDER
DURACIÓN: 115 min.
AÑO: 2012
GÉNERO: POLICIACO
Las películas más recientes de temáticas de espías parecen haber sufrido el inevitable "efecto Bourne", es decir, que se preocupan por desarrollar argumentos con gancho que despisten por momentos al espectador, sólo para conseguir que se implique más en la acción del largometraje y que, así, pueda identificarse con los personajes y los acompañe a lo largo del metraje en los descubrimientos que éstos van haciendo. Evidentemente, aunque la receta no sea nada nuevo, así que parece haber sido redescubierta gracias a la serie del films inspirados en el famoso espía creado por Robert Ludlum. Así pues, mientras Matt Damon parece haberse tomado un respiro después de tanta trama de espionaje, ahora son el siempre acertado Denzel Washington y el cada vez más ascendiente Ryan Reynolds quienes se encargan de jugar a las intrigas gubernamentales, mezclando la acción trepidante con una historia que interesa tanto por su puesta en escena como por su argumento.
Matt Weston (Reynolds) es un joven agente de la CIA que completa su formación como responsable de un piso franco en Ciudad El Cabo, aunque él querría poder ocuparse de misiones como un agente más de campo. Su gran oportunidad parece presentarse el día que una serie de agentes se refugia en el piso franco que Matt regenta para proteger la extradición de Tobin Frost (Washington), un peligroso ex-agente de la agencia, acusado de espionaje y venta de información secreta al mejor postor. Sin embargo, cuando una serie de mercenarios asalta el piso franco y liquida a todos los agentes, Matt se ve obligado a huir con Tobin con el fin de proteger la vida de ambos. Sin embargo, ni Tobin le pondrá las cosas fáciles, ni le resultará sencillo a Matt seguir las órdenes recibidas desde los Estados Unidos por sus superiores.
"El invitado" es un film concebido única y exclusivamente para entretener a las audiencias. Por fortuna, los responsables del largometraje no se conforman solo con prestar atención a la pura diversión, sino que procuran que el film también tenga una base más o menos lógica. Para ello, todo aquello relacionado con los secretos gubernamentales y de estado en lo que está implicado el personaje de Washington sirve de excusa para realizar una película de lo más efectiva. El casi debutante director sueco Daniel Espinosa (aunque no lo parezca, a tenor de su nombre y apellido), le pone en bandeja al espectador un cocktail explosivo de acción e intriga policiaca que tiene cabida tanto para los grandes fuegos de artificio como para las secuencias que requieren de algo más de sosiego. Sin embargo, sí que se agradece que, a pesar de que los instantes más dinámicos cuenten con un acelerado montaje, las imágenes nunca resultan confusas ni los planos excesivamente breves (como sí pasa en la mayoría de los films de Paul Greengrass o Michael Bay, por poner dos ejemplos). Y esto es algo que repercute muy favorablemente en "El invitado". En todo momento se sabe por dónde disparan los villanos, y de qué forma consiguen escaparse los buenos, de forma que el público puede acompañar a los protagonistas durante todo este excelente y divertidísimo juego de intriga.
Por lo demás, cierto es que "El invitado" no deja de ser más que un film de puro entretenimiento, por lo que su trascendencia queda limitada tan solo al momento en que los espectadores están disfrutando del film. Más allá de la sala de cine, lo único que queda es el recuerdo de haber visto una buena película (más por lo entretenida que por la calidad global del film), pero que convence con la suficiente efectividad como para que el público se lo pase bien viéndola.
"El invitado" es la típica película que ves para distraerte un rato, y pasártelo bien. Lo que viene siendo un pasatiempo en el mejor sentido de la palabra. El argumento es interesante; la forma en que está hecha, trepidante; las actuaciones, convincentes. Si te paras a pensar un poco, la peli es como una especie de pelis estilo Jason Bourne mezclada con cualquier historia de intrigas de espías de la CIA y toda esa pesca. Vamos, de lo que hace que te sientes en la butaca y te olvides del resto del mundo durante un ratito cosa que, ahora mismo, es de muy agradecer (es que hay cada mierda que ha salido últimamente en el cine...).
Además, "El invitado" tiene otras cosas que me han llamado favorablemente la atención. La primera, es que es una gozada ver actuar a Denzel Washington. El tío te hace creíble cualquier personaje, independientemente de que la peli sea una patata o algo más decente (hasta chuflas como "El libro de Eli - Book of Eli, 2010" o "Imparable - Unstoppable, 2010" son más pasables gracias a él), y cae bien tanto cuando hace de bueno de turno como cuando, como en este caso, no es que sea un angelito de la guarda. Por su parte, el ex de Scarlett Johansson, el amigo Ryan, hay que reconocer que demuestra saber un poquito lo que es actuar, y le aguanta el tipo a Washington de forma bastante convincente.
Otro de los puntos positivos, es que no te ambientan la peli en la típica ciudad norteamericana sino que, como pasaba también con esa maravilla que es "District 9 - District 9, 2009"), todo pasa en Sudáfrica, enseñándote tanto las partes más cosmopolitas de las grandes ciudades como los barrios más chungos, parecidos a las favelas brasileñas. Supongo que es esa variedad de escenarios lo que ayuda a hacer más trepidantes las secuencias de persecuciones (desde la huida en coche por la ciudad, hasta la persecución por los tejados de un barrio marginal).
Ahora bien, "El invitado" tiene alguna que otra cosa de lo más prescindible. Por ejemplo, la identidad del malo malísimo. El que no sea tonto del bote, puede adivinar a los cinco minutos quién es el pavo que se encuentra detrás de todo, y eso es algo que jode bastante en una peli como esta. Supongo que tampoco les hubiera costado mucho currarse un pelín más el guión para que la identidad del traidor fuera un poco más sorprendente, pero bueno, tampoco es como para rasgarse las vestiduras. Otra cosa que tampoco me ha convencido mucho ha sido el final. Vale que de alguna forma tenían que ponerle punto y final. La lástima es que no tenga la misma garra que tiene el resto de la peli, que te mantiene casi sin pestañear. Y todo ello, por no mencionar los pedos cerebrales que se sueltan en algún momento (a uno le meten un cristal puntiagudo en mitad de los intestinos, y como si nada; o disparan al lado de su oído, y ni se queda sordo ni nada, sino que sigue bambando más chulo que un ocho).
Pero vamos, en resumen, "El invitado" es una película recomendable si lo que queréis es distraeros durante un par de horas, y estar viendo algo interesante, muy bien hecho, e interesante en plan peli de espías. Afortunadamente, no han convertido la peli en la típica de acción con disparos a tutilpén -y eso que los tiene, y bastantes-, sino que le dan su importancia a la historia. Así que ya sabéis, si no encontráis nada más que os llame la atención, "El invitado" puede ser una buena opción para escoger para ver el finde.