martes, 26 de julio de 2011

CINE DE LOS 80: "ARMAS DE MUJER"


TÍTULO: ARMAS DE MUJER

DIRECTOR: MIKE NICHOLS

REPARTO: MELANIE GRIFFITH, SIGOURNEY WEAVER, HARRISON FORD, JOAN CUSACK, ALEC BALDWIN

DURACIÓN: 118 min.

AÑO: 1988

GÉNERO: COMEDIA

  • EL DR. JECKYLL DICE:

  • Siendo un film menor en la rica filmografía de Mike Nichols, "Armas de mujer" logró llamar particularmente la atención por ser uno de los primeros (y pocos) largometrajes que presentaban a la mujer como un miembro más del agresivo mundo de los negocios, tradicionalmente reservado a un sector demográfico más masculino, y donde demostraba que no sólo era capaz de competir en igualdad de condiciones sino, además, ser aún mejor que todos esos "tiburones" de las finanzas. Y, por si ello fuera poco, además lucía un cartel de lo más atractivo, gracias a la presencia de tres de los actores más respetados de la industria, muy en alza por aquel entonces gracias a los respectivos éxitos que habían logrado alcanzar, cada uno a su nivel.


    Partiendo de un guión de Kevin Wade, muy bien escrito y mejor llevado, la historia comienza presentando a Tess McGill (Griffith), una secretaria que trabaja en una importante compañía de Wall Street, con un carácter excesivamente fuerte para los gustos de sus jefes, la mayoría de los cuales son tan machistas como cretinos, por lo que no consigue mantenerse fija mucho tiempo en un mismo puesto de trabajo. Por este motivo, cuando se le ofrece la posibilidad de trabajar como secretaria para una importante mujer de negocios llamada Katherine Parker (Weaver). En un principio, el entendimiento entre las dos no puede ser mejor. Sin embargo, un aparatoso accidente de esquí deja inmovilizada a Katherine por un tiempo, siendo entonces cuando Tess descubre que su jefa tenía la intención de robarle una más que interesante idea para lograr cerrar una importante operación de fusión. Por ello, aprovecha la usencia de Katherine para hacerse pasar por su propia jefa, y poner en marcha la operación con la ayuda de su mejor amiga Cyn (Cusack) y de Jack Trainer (Ford) un importante hombre de negocios que participa en la otra parte de dicha fusión.


    "Armas de mujer", sin pretender en ningún momento ser una película de denuncia feminista, consigue resultar una agradable comedia sobre los pormenores de abrirse camino en un mundo de lo más duro y competitivo, pero haciendo hincapié en unos principios basados en la honradez y buena praxis. Quizás sea por ello que la interpretación de Melanie Griffith acaba por ser, sin duda, una de las mejores de toda su carrera, pues la esposa de Antonio Banderas es capaz de dotar a su personaje tanto de las maneras burdas y toscas de las secretarias más descerebradas para, segundos después, mostrarse como una auténtica máquina para los negocios (memorable la secuencia en que le confiesa a un socarrón Harrison Ford "tengo una mente para los negocios y un cuerpo para el pecado"). Por su parte, Weaver es capaz de interpretar a la perfección tanto el papel de jefa comprensiva (el momento en que anima a Tess a no desanimarse porque su idea no haya sido aceptada por los jefes superiores -cuando en realidad sucede justo lo contrario-) como de cínica manipuladora (soberbio el final en que se la pone en evidencia delante de la plana mayor). Los secundarios tampoco se quedan atrás, y tanto Joan Cusack como Alec Baldwin cumple con solvencia sus respectivos papeles.


    Finalmente, cabe destacar un par de aspectos más. El primero es la asombrosa comodidad con la que parece llevar la historia Mike Nichols, un excelente director más acostumbrado a la realización de largometrajes con fuertes cargas dramáticas ("¿Quién teme a Virginia Wolf? - Who's afraid of Virginia Wolf, 1966" o "Closer, cegados por el deseo - Closer, 2004") que a las comedias de este tipo, quien no desaprovecha para nada la oportunidad de demostrar saber hacer una comedia de calidad, sin caer en ningún momento en ninguno de los tópicos que, por desgracia, se encuentran tan presentes en este tipo de producciones. El segundo es la inmensa popularidad que alcanzó la canción que constituye el tema principal de la película, Let the river run, en base a la cuál casi parece construirse toda la historia que va guiando a los personajes por las diferentes partes de la película. "Armas de mujer" es una película muy bien hecha, intrascendente pero asombrosamente digna, capaz de mostrar a la mujer como un miembro más (y mucho más eficaz de lo que muchos piensan) del mundo de los negocios. Y si, además está protagonizada por actores estupendos en plena forma y pleno estado de gracia, la experiencia no puede acabar siendo más positiva. Una película amable de principio a fin.



  • MR. HYDE DICE:

  • Esta es una de mis películas favoritas. Sé que no es gran cosa, y que a penas podría pasar de ser una comedia muy simpática sin ninguna pretensión más. Pero cuando la vi por primera vez, a los trece años recién cumplidos, me quedé fascinado. Sí, ya sé que suena exagerado, pero mira, fijo que a vosotros os ha pasado también con alguna otra peli que tampoco es que sea el no va más, y aún así le guardáis un cariño especial, ¿no? Bueno, pues a mí eso mismo me pasó en su día con "Armas de mujer" -que, por cierto, vaya mierda de título le han traducido al español-. Es más, me gustó tanto el mundo empresarial en el que se mueven todos los personajes, hablando de acciones, fusiones y adquisiciones, y no sé qué más cosas, que fue en ese momento en el que decidí hacer una carrera que me permitiera un día ser como ellos (puede que lo que me gustara en realidad fuera el propio hecho de hacer películas, más que la economía, pero bueno, eso ya es otro rollo que a vosotros ni os va ni os viene).


    La historia de la peli está muy bien llevada, siendo una especie de cuento de la Cenicienta pero ambientado en el mundo de los yupis (¿os acordáis de ellos?) americanos. Melanie Griffith borda el papel de secretaria que parece tonta, pero que acaba siendo más lista que todos juntos, mientras que Sigourney Weaver (¿qué será de esta mujer? Con lo buena actriz que es, casi ni se la ve últimamente) se sale haciendo de jefa zorrona. Lo más flojillo de todo el elenco es Harrison Ford, que se limita a aportar su carisma habitual (cuando no hace chorradas como las últimas castañas que se ha cascado el pobre hombre) y poco más.


    Pero, si hay algo por encima de todo que hay que destacar, es la canción. No tenía ni idea de quién era la tal Carly Simon que se llevó el Oscar por Let the river run, pero desde luego se quedó a gusto después de parir este temazo. Es como la peli, que tiene un no sé qué que hace que tengas ganas de escucharlas seguida más de una vez.


    Y, por lo que respecta al resto de la peli, sólo añadir a todo lo dicho que es una comedia tremendamente amable, muy entretenida, y con un guión inteligente que les permite a las actrices lucirse a base de bien. Vamos, de ese tipo de pelis que, cuando empiezan a salir las letras del final, te das cuenta que estás con una sonrisa tontorrona en la cara. Supongo que será buena señal. Desde luego, a mí me sigue gustando a rabiar cada vez que tengo ocasión de verla, y os aseguro que ya han sido unas cuantas veces.





    BONUS TRACK DE MR. HYDE:


    Este es un detallito para un par de amigas mías que tengo al otro lado del charco (bueno, una va y viene, pero igual... creo que ahora está de vuelta de San Francisco...), para que recuerden lo bien que nos ha hecho escuchar alguna que otra vez esta canción, y lo mucho que nos seguiremos acordando de aquellos días cuando la oigamos de nuevo. Miss U ladies!