sábado, 14 de julio de 2012

CINE A DESCUBRIR: "FLYBOYS, HÉROES DEL AIRE"

TÍTULO: FLYBOYS, HÉROES DEL AIRE

DIRECTOR: TONY BILL

REPARTO: JAMES FRANCO, JEAN RENO, MARTIN HENDERSON, CHRISTEN ANHOLT, JENNIFER DECKER, PHILIP WINCHESTER, DAVID ELLISON, ABDUL SALIS

DURACIÓN: 139 min.

AÑO: 2006

GÉNERO: BÉLICO

  • EL DR. JEKYLL DICE:
  • Estoy de acuerdo con mi buen amigo Hyde en que no es frecuente que se aborden en abundantes producciones cinematográficas el conflicto que supuso el estallido de la Primera Guerra Mundial. Seguramente sea porque los hechos acaecidos durante la Segunda permiten una mayor creatividad a la hora de desarrollar historias tanto de ficción como basadas en hechos reales. En cualquier caso, coincido en que "Flyboys, héroes del aire" contiene elementos que hacen de ella una propuesta mucho más original que el resto de argumentos que ya han sido recogidos cientos de veces en otros largometrajes aunque, como película bélica que es a fin de cuentas, tampoco puede evitar caer en ciertos clichés. No obstante, antes de adelantar acontecimientos, echemos un vistazo a su argumento.

    Al comienzo de la Primera Guerra Mundial, un grupo de jóvenes acude a la llamada de reclutamiento del ejército francés, que busca pilotos capaces de hacer frente a los mucho más experimentados del ejército alemán. Entre ellos, se encuentra Blaine Rawlings (Franco), un joven norteamericano en busca de una nueva oportunidad en su vida, Higgins (Alholt), un conductor de ambulancias que pretender hacer algo más de provecho durante la guerra, William Jensen (Winchester), un acomodado hijo que tiene que soportar la carga de que su padre sea un gran militar, Eugene Skinner (Salis), un aspirante a boxeador de raza negra que se siente discriminado por el color de su piel, y Reed Cassidy (Henderson), un piloto más veterano afectado por la muerte de todos sus amigos. A ellos, se les unirá el capitán Thénault y la bella gala Lucienne (Decker), con quien Rawling vivirá una intensa historia de amor.

    Yendo por partes, en primer lugar, cabe elogiar la labor tras las cámaras del director, Tony Bill. Bill, curtido más en otro género de largometrajes y formatos (es conocida su experiencia como realizador televisivo), hace gala de un estilo elegante, emocionante y repleto de acción trepidante, sin olvidarse de que detrás de todo buen espectáculo debe encontrarse una historia que lo respalde. Posiblemente sea éste el talón de Aquiles de la película pues, si bien es indiscutible la grandiosidad de sus escenas de enfrentamientos aéreos (la espectacularidad de éstas va creciendo a medida que avanza el film), no puede evitar caer en cierto tedio en las secuencias que tienen lugar en tierra. Por poner un caso, la historia acerca de la discriminación que padece Skinner termina siendo redundante (hasta el espectador más inocente puede adivinar en seguida que éste acabará siendo uno más del grupo), al igual que sucede con Jensen y la presión que supone ser el hijo de un importante militar o, ya puestos, del desenlace que tendrá en la historia la relación amorosa que surge entre Rawlings y Luciane (el instante en el que ambos vuelan a bordo del avión de Rawligns resulta una copia descarada para adolescentes del paseo en avioneta que daban Robert Redford y Mery Streep en "Memorias de África - Out of Africa, 1985").

    No obstante, "Flyboys, héroes del aire" logra sobreponerse a estos pequeños inconvenientes argumentales y a la predecibilidad de su conjunto para ofrecer un espectáculo digno, bien llevado (la fotografía y diseño de producción son excelentes -ver ese plano del avión entre la niebla acercándose al campamento francés-), y con secuencias de acción tan trepidantes como impresionantes. Por supuesto, el espectador tiene que estar dispuesto a aceptar las reglas del juego, y dar por hecho que es posible saltar al vacío desde un zeppelin para escapar a una muerte segura, o disparar un tiro certero en pleno vuelo y estando malherido para liquidar al enemigo. No obstante, si el público se concentra más en el entretenimiento que ofrece "Flyboys, héroes del aire", encontrará en esta poco conocida película un pasatiempo excelente.

  • MR. HYDE DICE:
  • No sabía mucho de "Flyboys, héroes del aire" antes de verla. Sabía más o menos de qué iba, pero poco más. Lo que me interesaba de la peli era, primero, que tratara sobre la Primera Guerra Mundial, que parece que todas las películas de guerra que hacen tienen que ver con los nazis o con la Guerra Civil española -ahí no es que sean algunas, sino que parece que no sabemos hacer otra cosa más que eso donde, por supuesto, los rojos son los únicos buenos, pobrecitos míos... pero bueno, eso es ya otra historia- y, segundo, que trataba sobre los aviadores en plan Barón Rojo. De las pelis así en plan Primera Guerra Mundial sólo recuerdo la de Spielberg del caballo (que es un tostón) y la de "Largo domingo de noviazgo - Longue dimanche de fiançailles, 2004", que me pareció un peliculón. Así que suponía que, teniendo en cuenta que los americanos, cuando quieren, saben hacer unas pelis chulas de verdad, "Flyboys, héroes del aire" podía ser algo interesante. Por suerte, no me equivoqué, porque esta peli, sin ser nada de Oscar ni por el estilo, es un chulada, consigue ser interesante durante las dos horas y pico que dura, y tiene algunos de los momentos de batalla aérea más impresionantes que he visto en una película.

    Os decía que hay varias cosas que me llamaban la atención antes de ver la peli. De todas ellas, intentaré deciros cuáles acaban siendo guapas de verdad, y cuáles no tanto, por si os sirve de orientación y ánimo a la hora de ver la peli. Entre las que molan, para empezar, diría que está el tema. Aquí, para ser exactos, va sobre el Escuadrón Lafayette (y no es que me sepa el nombre de memoria, sino que lo he consultado antes), que vino a ser algo así como un grupo de pilotos que volaron para los franceses haciendo frente a los alemanes. En la peli, sin entrar mucho en detalles, consiguen que las movidas personales que tiene cada uno de ellos -entre los que está más de un yanqui, of course-, los recuerdos de sus familiares queridos y alguna que otra gota de ese patriotismo hortera que les gusta tanto a los americanos se mezclen de forma que el resultado sea una pasada. Es curioso que, dentro de la propia historia de cada uno (el americano a cuya familia han dejado en la calle, el chaval negro al que dice que discriminan por su raza, el ricachón que se quiere rebelar y demostrar que es algo más que un niño mimado, el veterano que quiere vengar a sus amigos muertos...), se va poniendo todo en conjunto entre batallas espectaculares, no sólo sin aburrir, sino haciéndolo todo súper interesante.

    Además, están por supuesto los efectos especiales. Aquí no se están soltando ningún pedo cerebral como esas otras películas de guerra en que sacan un huevo de aviones reventando media ciudad por los aires. Tampoco es que sea "Pearl Harbor - Pearl Harbor, 2001", donde tiraron la casa por la ventana para que te creyeras que los aviones que estaban combatiendo eran de verdad. En "Flyboys, héroes del aire", las escenas de combates de aviones son alucinantes. Precisamente, porque no son a base de explosiones, movimientos de cámara epilépticos ni nada por el estilo. De hecho, son súper espectaculares y hacen que estés atento todo el rato. Primero, porque quieres que no se carguen a los buenos -aunque no hace ser muy listo para tener claro que hay alguno que acaba criando malvas-, y segundo porque tiene mogollón de tensión. Y, si no, fijaos en un par de momentos en particular: el primero, el primer combate, en el que al bueno casi lo dejan más tieso que una mojama; el segundo, cuando entra en juego el dirigible nazi, y donde la batalla no puede ser más trepidante porque no tiene tiempo. Además, una cosa que, particularmente, agradezco, es que se trata a los "enemigos" (oséase, a los alemanes) con cierta dignidad. Está claro que son los malos, pero no salen como una panda de psicópatas desgraciados mientras que los aliados son las almas cándidas por excelencia (salvo Jean Reno, que tiene una cara tan simpática que cuesta creer que no haya roto un plato en su vida, jeje).

    En contra de "Flyboys, héroes del aire", pues poca cosa por mi parte. Supongo que podría criticar que sea demasiado larga ya que, al fin y al cabo, podrían haber quitado escenas de relleno (los traumas de cada uno de los del escuadrón los podían haber reducido un pelín, o no poner a tanto actor con cosas importantes -según ellos- que decir), y no ser tan predecibles con la historia de amor entre el yanqui y la francesita de cara angelical de turno, que se nota un huevo que está puesta ahí para que el americano se dé una alegría al cuerpo y la peña tenga algo más romántico que ver en la peli.

    Por lo demás, os aconsejo que veáis "Flyboys, héroes del aire", porque no es la típica película de guerra llena de tiros, muertos y explosiones. Sí que hay momentos de bombardeos y combates, pero ya os digo que están hechos de una forma bastante diferente a como estamos acostumbrados de verlos. A las chicas, seguro que les gusta toda la parte más pastelorra, y los tíos fliparéis con los momentos de enfrentamientos aéreos. De hecho, me gustó tanto "Flyboys, héroes del aire" que estoy impaciente porque se estrene una peli parecida, producida por George Lucas, y que se llama "Red Tails". Pero bueno, de esa ya os hablaré otro día.