martes, 12 de julio de 2011

CINE DE LOS 80: "JUNGLA DE CRISTAL"


TÍTULO: JUNGLA DE CRISTAL

DIRECTOR: JOHN MCTIERNAN

REPARTO: BRUCE WILLIS, ALAN RICKMAN, BOINNIE BEDELIA, REGINALD VELJOHNSON

DURACIÓN: 123 min.

AÑO: 1988

GÉNERO: ACCIÓN




EL DR. JECYLL DICE:


Durante los años 70, el llamado "cine de catástrofes" había alcanzado su punto más alto, con títulos que, además de haber logrado elevadas recaudaciones en taquilla, también habían sido realizados con un cuidado sentido de la estética y del ritmo, ganándose así la simpatía del público. No obstante, a base de repetir una y otra vez la fórmula (las continuaciones de la serie "Aeropuerto" son el mejor exponente de ello), el público había acabado por darle la espalda en busca de contenidos más novedosos -circunstancia que Spielberg, Lucas y otros aprovecharon para darse a conocer con sus impactantes films de aventuras y ciencia ficción. Por este motivo, cuando a finales de los años 80 se estrenó un film de acción llamado "Jungla de cristal", que bebía de las fuentes del cine de catástrofes que tan popular había sido, los espectadores sintieron curiosidad por ver en qué forma se había vuelto a abordar el tema, y qué cambios se habían producido con el paso del tiempo y avance de las tecnologías. El resultado, como se puede deducir a día de hoy por la repercusión que sigue teniendo, fue total.


Pocas películas del cine reciente -aunque no lo parezca, la primera entrega de las aventuras de John McLane ya tiene más de veinte años-, han tenido una influencia tan evidente en el resto de producciones del cine de acción como "Jungla de cristal". Además, este excelente largometraje supuso la consagración tanto de su director, John McTiernan (quien había debutado el año anterior en el cine más comercial con "Depredador - Predator, 1987"), como de su principal protagonista, Bruce Willis (conocido, especialmente, en aquellos días, por ser la estrella de la serie detectivesca "Luz de luna").


Partiendo de un guión escrito a cuatro manos por Jeb Stuart y Steven E. de Souza (quienes años más tarde también acabarían debutando en la dirección cinematográfica, aunque con resultados más que irregulares), y con evidentes influencias estéticas de este cine de catástrofes al que hacíamos referencia en la introducción -el diseño de producción del famoso Nakatomi Plaza es casi idéntico al del mastodóntico edificio de "El coloso en llamas - The Towering Inferno, 1974"-, la historia narraba la llegada a Los Ángeles de John McLane (Willis), un policía de Nueva York que va a pasar las Navidades con su mujer (Bedelia) e hijos. Sin embargo, durante su reencuentro en el rascacielos de la empresa en la que ésta tiene un importante puesto de directiva, un grupo de terroristas, liderado por Hans Grubber (Rickman) asalta el edificio con el fin de robar una importante suma de dinero que se encuentra guardada en la caja fuerte. McLane, que ha logrado escapar en el último minuto del registro de los terroristas, se ve, pues, obligado a hacer frente él sólo a todos los villanos, en una consecución de espectaculares tiroteos, explosiones y luchas cuerpo a cuerpo.


"Jungla de cristal" es la película de acción por excelencia del género, la primera que mostró a un héroe solitario capaz de diezmar a la banda de malvados con los pocos medios que tiene a su alcance, logrando sobrevivir a las situaciones más extremas. Y ello se consiguió gracias a la realización insuperable de John McTiernan. Rodeado de un grupo de colaboradores de primera línea (Jan de Bont al frente de la fotografía, Richard Edlund como jefe de efectos especiales, Michael Kamen como compositor de la banda sonora, y un montaje trepidante), una vez que arranca la acción de verdad, no hay secuencia que no resulte impactante, sobretodo si tenemos en cuenta que, en el momento de su estreno, pocas películas similares se habían visto en la gran pantalla. Así pues, secuencias como aquella en que McLane tira una improvisada bomba por el hueco de un ascensor, haciendo temblar todo el edificio o, sobretodo, la de la explosión de la potente bomba de la azotea mientras McLane salta al vacío atado a la cintura por una manguera, dejan al espectador con la boca abierta.


Pasados los años, "Jungla de cristal" sigue siendo una película actual, fresca y tremendamente entretenida. Cine de acción del bueno que, con mayor o menor acierto, se ha tratado de replicar desde entonces, y cuyas virtudes son tan evidentes que, revisionar de nuevo este largometraje, es un auténtico placer.



  • MR. HYDE DICE:

Sí señor, la película por definición del cine de acción. La primera de todas, la que hizo que luego, todas las demás (hasta ella misma en sus otras partes) la copiaran hasta cansarse, y la que puso de moda lo que tenía que ser una macho movie como toca, pero de calidad. "Jungla de cristal" es un peliculón de los grandes, sin necesitar que pasen tropecientos años para convertirse en un clásico. Y lo bueno que tiene, entre otras cosas, es que no sólo se trata de imposibles secuencias de acción con los héroes haciendo piruetas de esas que te rilas para cargarse al malo de turno, sino que es aventura cañera de la buena, de esa que te lo pases pipa y, además, te diviertas como un enano (máximo respeto a los enanos).


Además, creo que hay una cosa diferente al resto de pelis parecidas, que sí ha estado presente en todas las continuaciones que ha tenido "Jungla de cristal". En primer lugar, el sentido del humor tan socarrón y flipado que es capaz de darle Bruce Willis a su personaje no ha sido ni siquiera rozado por todos los Stallones, Chochanaguers y Van Dammes que después han hecho lo mismo. En segundo lugar, que se ve sufrir al héroe. En las cuatro partes de "Jungla de cristal", McLane acaba hecho una mierda, a cada cuál más reventado, que casi te dan ganas de meterte en la peli y ayudarle a ponerse en pie (en la primera parte, la secuencia en que se tiene que quitar los cristales que se le han clavado en los pies da escalofríos). Eso sí, les da por la puerta de atrás a los malos a base de bien.


En fin, que es una de esas pelis que, por mucho que luego hayan machacado el género con plastas casi calcadas y de muchísima menos calidad, siempre agrada volver a ver. Aunque sólo sea por poder ver de nuevo lo que es una buena peli de acción, y disfrutar con un espectáculo de los guapos. Por cierto, ¿podría alguien decirme quién es el espabilado que a una película cuyo título original en castellano vendría a ser "Duro de matar" se le ocurrió la genial idea de llamarla "Jungla de cristal"? ¿Se puede saber qué coño tiene una cosa que ver con la otra? Menudo espabilado...