lunes, 13 de agosto de 2012

CINE CLÁSICO: "AGENTE 007 CONTRA EL DR. NO"

TÍTULO: "AGENTE 007 CONTRA EL DR. NO"

DIRECTOR: TERENCE YOUNG

REPARTO: SEAN CONNERY, URSULA ANDRESS, JOSEPH WISEMAN, JACK LORD, BERNARD LEE, JOHN KITZMILLER

DURACIÓN: 110 min.

AÑO: 1962

GÉNERO: POLICIACO

  • EL DR. JEKYLL DICE:
  • Poco podía imaginar el escritor Ian Fleming cuando, al publicar a mediados del siglo pasado su novela Casino Royale, que el personaje principal, un agente del servicio secreto británico con licencia para matar llamado James Bond, se convertiría también en uno de los personajes más famosos de la historia del cine. O que, más de cincuenta años después del estreno de la primera película en la que hace su aparición el famoso agente, no sólo se seguirían rodando películas protagonizadas por él sino que, además, el rodaje y estreno de cada una de ellas se convertirían en un acontecimiento mundial. En lo que a la película que hoy nos concierne, "Agente 007 contra el Dr. No", es la primera película "oficial" de la serie que se rodó y estrenó, logrando tan buenos resultados y críticas que, como suele decirse, el resto ya es historia.

    James Bond (Connery) es un agente secreto que trabaja para el gobierno británico. Cuando una serie de agentes encubiertos son asesinados en una isla de Jamaica, Bond es enviado por su superior, M (Lee) allí para investigar que se esconde tras sus misteriosas muertes. Será entonces cuando, gracias al apoyo de un agente de la CIA llamado Felix Leiter (Lord) y a un nativo, Quarrel (Kitzmiller), comienza a sospechar de las actividades que desarrolla en una isla privada un científico multimillonario al que sólo se conoce con el nombre de Dr. No (Wiseman), cuya mayor particularidad es que, a causa de un accidente químico, en lugar de manos posee dos prótesis metálicas.

    Llama la atención que, para el debut en la gran pantalla de Bond, se escogiera la sexta novela -siguiendo el orden cronológico- que Fleming había escrito, por encima de otros títulos que, años más tarde, también conocerían su correspondiente adaptación cinematográfica. Desconocemos a qué se debió tal decisión, aunque no cabe duda de que "Agente 007 contra el Dr. No" contiene todos los elementos que, con el tiempo, identificarían de forma casi definitiva al personaje. En efecto, Bond es presentado como un experto investigador (atención a las deducciones que va haciendo a medida que avanza la investigación: los resultados de los análisis químicos que habían solicitado los agentes asesinados, la forma de desenmascarar a sicarios que se hacen pasar por agentes de policía, o la resolución del mito del dragón que se dice habita en la isla del Dr. No), un mujeriego empedernido (atención a la forma en que consigue seducir a todas y cada una de las mujeres con las que se cruza, independientemente de que éstas le hayan tendido una trampa minutos antes), aficionado a la buena vida (los viajes en primera clase y estancias en hoteles lujosos), y con una sangre fría escandalosa (no vacila en hacer que retuerzan el brazo de una joven jamaicana con el fin de obtener la información que precisa).

    Por supuesto, "Agente 007 contra el Dr. No" no sólo supuso la consagración de James Bond como máximo representante de todos los agentes secretos, sino también de Sean Connery como uno de los actores más representativos del momento. Si bien Connery ya era conocido gracias a sus trabajos previos con realizadores como Robert Stevenson o John Guillermin, James Bond no sólo le dio la oportunidad de interpretar a su personaje más famoso sino, también, abrirle las puertas de una industria que le permitiría trabajar con realizadores como Alfred Hitchcock, Sidney Lumet, John Houston, Steven Spielberg o Brian de Palma entre otros. No obstante, en lo respecta a su interpretación de Bond, a pesar de las -injustas- comparaciones que se han hecho con respecto al resto de actores que han dado vida a 007, la de Connery destaca por encima de todas gracias a la inigualable composición que hizo del personaje, combinando sentido del humor, cinismo, machismo y elegancia. Cierto es que cada uno de los posteriores actores le ha dado a James Bond una orientación particular pero, Connery, sea o no gracias a haber sido el primero en interpretar a Bond, ha conseguido que, incluso hoy en día, él siga siendo el ejemplo por antonomasia del agente secreto más sofisticado.

    Ahora bien, en lo que se refiere a "Agente 007 contra Dr. No" como obra, ésta se encuentra a la par con la del resto de adaptaciones de novelas de Fleming. Sin embargo, este primer largometraje sí que destaca por su estupenda puesta en escena (la mayoría concentrada en el tercio final del film, tan pronto la acción se traslada a la isla del Dr. No) y por los momentos de tensión por encima de la espectacularidad. A este respecto, destacan secuencias como aquella en la que Bond aguarda la llegada de un "conocido" encargado de liquidarle, u otra en la que logra deshacerse de una enorme araña venenosa que le colocan entre las sábanas, evitando que le pique.

    En resumidas cuentas, "Agente 007 contra el Dr. No" es una película que, vista de nuevo hoy en día, a pesar de los detalles -sobretodo tecnológicos- que evidencian el paso del tiempo, ha aguantado a la perfección los años transcurridos desde su estreno. Así pues, "Agente 007 contra el Dr. No" es una película de aventuras estupenda, interpretada con una convicción absoluta, gracias a la cuál el cine de agentes secretos que se sigue realizando hoy en día es lo que es.

  • MR. HYDE DICE:
  • ¡Vaya tela! A quien se le diga que James Bond tiene más años que Matusalén no se lo cree. Vaya por delante que soy un fanático total del amigo con licencia para matar, y que me sé casi de memoria todas las pelis de la serie (bueno, hay alguna que no tanto, porque me parece un bodrio -¿alguien dijo "Operación trueno - Thunderball, 1965"?-), así que puede que me entusiasme más de la cuenta hablando de la peli. Pero bueno, si con ello consigo que se os pegue una décima parte de la afición que tengo yo por Bond, estaré más contento que unas pascuas. En fin, vamos al turrón.

    Si me aceptáis un consejo (y, si no, me la pela porque os lo voy a dar igualmente), "Agente 007 contra el Dr. No" la tenéis que ver teniendo en mente las pelis de James Bond que se hacen ahora. Más que nada porque no se puede comparar toda la sofisticación de los inventos, tecnología y coches (el invisible de la última que hizo Pierce Brosnan ya es para mear y no echar gota) con lo que ves en esta primera. De todas formas, sí que tiene el encanto de esas cosas que, después, con cada nueva peli, irán haciéndose clásicos, como las bebidas que se insufla el colega, las mujeres que se cepilla, o el estilazo ese de estar elegante hasta cuando se mete en un pantano. Y, por supuesto, qué decir de la aparición de Ursula Andress en bikini con las cochas en una mano y el cuchillo en la otra. Vamos, que digo yo que si eso no fuera ya algo clásico, no lo hubieran imitado en una de las últimas que hicieron (cambiando a Ursula Andress por Halle Berry).

    Acerca del resto, tampoco se puede contar mucho más sobre "Agente 007 contra el Dr. No" que no se haya dicho o se sepa ya, sin quitarle algo de gracia al asunto. A mí, particularmente, me gustan, por ejemplo, mucho más las escenas de acción que tiene la peli (la persecución de Bond con una especie de coche fúnebre a toda mecha por un puerto de montaña, toda la destrucción de estación nuclear -o lo que sea- del Dr. No, etc.) que lo que es la investigación. Cuidado, que la investigación de la muerte de sus colegas y lo de averiguar quién demonios es el Dr. No está súper currando, pero lo otro me gusta más. Eso sí, lo que me parece que está genial hecho de "Agente 007 contra el Dr. No" es esa serie de detalles que hace que estés expectante (para los de la E.S.O., "expectante" = "al loro a ver qué se cuece") todo el rato: lo de la araña que decía antes del de arriba, cuando todo el mundo habla de la isla y del dragón sin saber qué es, o todo lo que rodea al Dr. No (fijaos en cuando entra en la habitación en la que está durmiendo James Bond sólo para echarle un vistazo antes de reunirse con él al día siguiente). Y, por supuesto, el malo. Para mi gusto, el Dr. No no es de los mejores malos de las pelis de Bond pero, aparte de ser el primero, sí que tiene esa tranquilidad propia de los malos de estas pelis (de los que cuentan todo su plan para reventar el mundo entero, para entendernos), con ese toque de tío raro -las manos de hierro- que le acaban jugando una mala pasada.

    En fin, que casi parece mentira que haya pasado medio siglo desde que la peña conoció a James Bond. Aparte de eso, "Agente 007 contra el Dr. No" es una peli estupenda, que se deja ver con una facilidad cojonuda, y que te hace pasar un rato estupendo. Además, si ya eres un fanático del pollo al que le pone beber martini con vodka agitado no revuelto, pues ya de fábula.