lunes, 3 de octubre de 2011

CINE CLÁSICO: "¿QUÉ ME PASA, DOCTOR?"


TÍTULO: ¿QUÉ ME PASA, DOCTOR?

DIRECTOR: PETER BOGDANOVICH

REPARTO: BARBRA STREISAND, RYAN O'NEIL, MADELEINE KAHN, KENNETH MARS, AUSTIN PENDLETON

DURACIÓN: 94 min.

AÑO: 1972

GÉNERO: COMEDIA

  • EL DR. JEKYLL DICE:

  • Encontrarse, dentro de la filmografía de Peter Bogdanovich, una película como "¿Qué me pasa, doctor?" es tanto un hecho insólito como una auténtica maravilla. El director neoyorquino, más conocido por sus larogmetrajes dramáticos ("Luna de papel - Paper moon, 1973", "Máscara - Mask, 1985") que por sus comedias ("¡Qué ruina de función! - Noises off!, 1992"), consiguió con la película que hoy comentamos una de las obras maestras de la comedia y, lo que es más complicado aún, una obra maestra indiscutible de guión. Dada la frecuencia con la que el cine de comedia suele olvidarse de que la buena base de toda película cómica no es la historia sino su guión, en "¿Qué me pasa, doctor?" se logró una armonía perfecta entre ambos elementos, haciendo que su delirante argumento rebosara ingenio por los cuatro costados.


    Howard Bannister (O'Neal) es un musicólogo, con un carácter tan dócil como sumiso a las directrices de su posesiva prometida Eunice (Kahn). Ambos acuden a San Francisco para que Howard defienda en una ponencia una tesis sobre rocas musicales que le puede hacer ganar un prestigioso premio. Sin embargo, en un momento en que éste acude a una droguería para comprar unas aspirinas, conoce de forma accidental a Judy Maxwell (Streisand), una alocada muchacha que decidirá hacerse pasar por su prometida ante todo el mundo tanto para conquistar a Howard como para alojarse gratis en el lujoso hotel donde se va a realizar la recepción de los premios. La situación se complica cuando los maletines de Howard y Judy, que son idénticos, se acaban mezclando con otros, también iguales que pertenecen a un espía del gobierno y a una adinerada anciana que va a ser objeto de un robo.


    Como si se tratara de una más de las geniales comedias de Blake Edwards, "¿Qué me pasa, doctor?" sabe desarrollar cada situación con un ingenio arrebatador. De entrada, llama la atención el desfile constante de personajes que no paran de mezclarse entre ellos, sin que el espectador pierda, en ningún momento, el hilo argumental. Asimismo, las frases de cada diálogo magníficamente interpretado por un insólito reparto de actores en pleno estado de gracia contiene alguno de los mejores momentos vistos en una comedia durante mucho tiempo (el intercambio de conversaciones antes, durante y después de la recepción de los premios es incomparable). Y, además, cuando el público piensa que ya no se puede rizar más el rizo (tras la estrambótica escena nocturna en las habitaciones del hotel -incendio incluido-), pues resulta que el director y guionistas se sacan de la manga una de las persecuciones más alocadas que se recuerdan en una pantalla de cine (con perdón de Stanley Kramer y su mundo loco loco loco): aquella que envuelve a la pareja protagonista en un triciclo de helados, y al resto de perseguidores en tres coches más, todos con la intención de hacerse con los maletines que han sido robados.


    En resumen, "¿Qué me pasa, doctor?" es una película atemporal, cuyo talento ha quedado patente desde el momento de su estreno, y que hoy en día continúa figurando como una auténtica obra sin igual del mundo de la comedia. Fantástica. Sublime.



  • MR. HYDE DICE:

  • ¡Qué despelote de película! En serio, me cuesta imaginar cómo de inspirados tenían que estar los que escribieron el guión de esta peli tan genial, cómo se les ocurrió tal cantidad de situaciones divertidas y tanto diálogo tronchante. Es como mezclar una peli de Blake Edwards con la verborrea de Tarantino (salvando las distancias, obvio). No hay una secuencia que no dé risa, y lo mejor es que casi sin pretenderlo, es decir, que no recurren a las típicas polladas del tipo de las de "Agárralo como puedas" y todas las imitaciones baratas del estilo. Aquí cada momento es brutal, siempre y cuando se siga con atención lo que dicen los personajes, que ya os digo yo que hablan y mucho.


    La primera vez que vi "¿Qué me pasa, doctor?" fue hace la pera de años. Pero os aseguro que no pasa más de un año desde entonces en que no me la vuelva a poner para partirme el culo, aunque esté yo solo viéndola. De hecho, no sabría destacar un solo momento: el lío de las habitaciones en el hotel, la cena de la entrega de premios, la persecución final al triciclo en el que se han llevado todos los maletines (impresionante el momento del dragón chino). Y lo más sorprendente de todo es que dos actores que, a priori, parecen ser más sosos que la castaña como Ryan O'Neal y Barbra Streisand te hacen reír casi contra su voluntad.


    De hecho, esa es una de las mejores cualidades de la peli, que te hace reír sin buscar la risa fácil. Al personaje de Howard lo ves realmente agobiado por culpa de la pirada esa que se ha cruzado en su camino, y a la otra -Judy creo que se llama- queda claro desde el principio que le falta más de una tuerca y que monta los pollos que monta porque esa es su forma de ser, independientemente de quién se le atraviese.


    En fin, sé que no es una película que pasen por la televisión con mucha frecuencia, pero sé que, con motivo de su reedición en DVD, ha vuelto a salir en algunos videoclubs y, por supuesto, en centros comerciales. Así que os recomiendo de veras que si queréis pasar un rato divertidísimo y reíros con ganas, no perdáis la oportunidad de ver esta genial película. De las que sigues recordando con el paso del tiempo, os lo digo yo.