sábado, 31 de diciembre de 2011

CINE EN CARTEL: "LAS AVENTURAS DE TINTÍN. EL SECRETO DEL UNICORNIO"


TÍTULO: LAS AVENTURAS DE TINTÍN. EL SECRETO DEL UNICORNIO

DIRECTOR: STEVEN SPIELBERG

REPARTO: -

DURACIÓN: 109 min.

AÑO: 2011

GÉNERO: ANIMACIÓN

  • EL DR. JEKYLL DICE:

  • Si hace un par de días hablábamos del caso de directores curtidos en el género de largometrajes de animación que dan el salto a película de imagen real, hoy toca hablar justo de lo contrario: de directores que dejan de momento los formatos tradicionales para aventurarse en el cine animado. Así pues, siguiendo el camino de su buen amigo Robert Zemeckis, en esta ocasión, ha sido Steven Spielberg quien se ha animado, junto a Peter Jackson, a dar vida a Tintín, héroe indiscutibles del cómic de aventuras, en uno de los largometrajes de captura por movimiento más trepidantes de los últimos tiempos y, también, a una de las películas de aventuras más recomendables del último año. Para ello, partiendo de un inteligente guión que combina el argumento tanto de los libros "El secreto del unicornio" como de "El cangrejo de las pinzas de oro", Spielberg ha realizado el que se espera sea el primero de una serie de films que tengan como protagonista a la célebre creación del dibujante francés Georges Rémi "Hergé".


    Tintín es un joven reportero que, paseando junto a su perro y fiel compañero Milú por un mercadillo, encuentra la hermosa maqueta de un barco antiguo que acaba comprando. Casi al instante, aparecen dos individuos distintos que le ofrecen recomprársela, mostrando un vivo interés en dicha pieza. Tras rechazar sendas ofertas, Tintín deja la maqueta en su casa y decide investigar qué se esconde tras esa maqueta. De regreso a su casa, descubre que la maqueta ha sido robada e, inmediatamente, es secuestrado y llevado a un buque carguero cuyo capitán, un alcohólico llamado Haddock, se encuentra recluido por sus propios hombres. A partir de este momento, tanto Tintín como Haddock deberán huir de su cautiverio y descubrir qué misterio oculta el famoso unicornio, para lo que la ayuda e historia de los antepasados de Haddock serán decisivos.


    Steven Speilberg, quien siempre se mostró un auténtico devoto de las historias de Tintín, demuestra con "Las aventuras de Tintín. El secreto del unicornio" que sigue siendo uno de los mejores realizadores de largometrajes de aventuras que ha dado la historia del cine. En esta ocasión, aparte de la evidente novedad que supone la realización del film mediante la técnica de captura por movimiento, la película es todo un ejemplo de lo que siempre debería ser un buen relato de aventuras, cuya inteligencia no depende de que éste se haga a través de la animación o con actores reales. Así pues, partiendo de un ingenioso guión, el largometraje consigue resultar interesante a la par que asombra con una realización espectacular plano a plano. Secuencias como la del relato del Capitán Haddock de lo que le sucedió al Unicornio (ese plano del enorme buque surcando las dunas del desierto, o la escena del abordaje a lo "Piratas del Caribe" que describe el enfrentamiento entre el Caballero de Haddoque y Rackham el Rojo), la de la huída a través del hidroavión por el desierto en mitad de una tormenta o, por supuesto, el plato fuerte del evento que es la increíble persecución por el poblado marroquí entre un jeep y una moto con sidecar (como ya hiciera antes el mismo Spielberg con la tercera entrega de Indiana Jones) son instantes que deslumbran al espectador de tal forma, que a penas puede apartar los ojos de la pantalla.


    Por su parte, a nivel técnico, y dejando a un lado la maravillosa labor de los efectos especiales, tanto el montaje de Michael Kahn como la música del maestro John Williams le aportan un dinamismo al conjunto que es recibido por los espectadores con los brazos abiertos, haciendo que "Las aventuras de Tintín. El secreto del Unicornio" sea una experiencia digna de las mejores historias de Hergé. Por consiguiente, el film no sólo es muy recomendable, sino que, con toda seguridad, contará con el apoyo de los fans que, como Hyde, temían por el salto definitivo del personaje a la gran pantalla. Éste es un largometraje de aventuras tremendamente entretenido, bien hecho y con ganas de divertir a todos los públicos, por lo que representa una oferta estupenda para disfrutar de estos días festivos de una buena película en el cine.



  • MR. HYDE DICE:

  • ¡Por fin hemos ido a ver la de Tintín! ¡¡Ueeeeee!! Jo macho, más de dos meses después de que se estrenara, he conseguido convencer a mi niña para ir a ver esta peli (ella no creció leyendo estos cómics, como la mayoría de los mortales de por aquí), que o lo hacíamos ya, o la quitaban de la cartelera. Y la verdad es que me alegro de no tener que verla en casa, porque está muy chula y estoy seguro de que perdería bastante en pantalla pequeña. Como era de esperar, con "Las aventuras de Tintín. El secreto del unicornio" han conseguido hacer una peli de aventuras cojonuda, haciendo que el cómic tenga más sentido que en cualquiera de las anteriores -y lamentables- películas que han hecho sobre Tintín. Eso sí, aquí, por mucho que el título diga que es "El secreto del unicornio", en realidad la historia es una remezcla un poco rara de ésta y de "El cangrejo de las pinzas de oro", pero lo suficientemente bien hecha como para que uno no necesite llevarse las manos a la cabeza por la patata que han hecho.


    Como os digo, el amigo Steven se ha currado una película que nada tiene que ver con los últimos truños que ha hecho (os juro que cada vez que recuerdo el último episodio de Indiana Jones, se me revuelve el estómago), y que es una aventura de principio a fin, con un ritmo estupendo que hace que las casi dos horas se te pasen en un plis. No sé qué habrá tenido Peter Jackson que ver en todo esto (he leído en algún sitio que es uno de los productores y que su empresa de efectos especiales es la que ha hecho todo el trabajo de animación), pero de lo que no cabe duda, es de que "Las aventuras de Tintín. El secreto del unicornio" tiene la huella de Spielberg por donde uno quiera mirar.


    Por lo que respecta a la propia película, está hecha con el mayor realismo que he visto nunca en una película de dibujos animados ("Avatar" no cuenta, que esa no era de dibus). Hace unos días hablábamos de "Polar Express - The Polar Express, 2004" y de cómo flipas con cómo estaba hecha. Vale, pues eso no es nada en comparación con ésta de Tintín. Aquí, absolutamente todos los personajes, incluso con las exageraciones de las caracterizaciones (esas napias enormes) parecen reales. Es más, hasta la expresión de la cara, que en otras pelis era lo más flojete, aquí flipas con cómo está creado (los ojos del Capitán Haddock, por ejemplo, son más expresivos que los de muchos actores de verdad). Y, si ya hablamos de la animación, pues para qué decir más. Así a bote pronto me vienen a la mente dos momentos impresionantes: el primero es al principio, cuando Milú se pone a perseguir a un gato por el piso de Tintín: el otro es, evidentemente, la persecución que tiene lugar en Marruecos, entre Tintín (en una moto) y los malos, para hacerse con los tres pergaminos. Toda esta parte son unos cinco minutos de plano ininterrumpido en los que la cámara va de un sitio a otro, recorriendo toda la ciudad y metiéndose por los sitios menos esperados hasta que termina toda la persecución. Os prometo que es de las cosas que, aunque no controles mucho de cine, te dejan con la boca abierta.


    Además, para los que se leyeron de pequeños mil veces los libros de Tintín, las referencias a sus historietas están por toda la película. Así de entrada, nada más entrar Tintín en su casa, hay artículos colgados en las paredes que hablan de "El loto azul", "El cetro de Ottokar" y "Los cigarros del faraón". Además, en un determinado momento, aparece la Castafiore (aunque, por desgracia, no le intenta tirar la caña al Capitán, como hacía siempre en los libros); en el palacete de un moro aparece, en una fuente -y en una caja del puerto-, un cangrejo con las pinzas de oro, y una de las estatuas que salían en "La oreja rota"; y el jeep en el que huyen los malos por la ciudad esa marroquí es el mismo que aparecía en "El país del oro negro". En fin, sé que son tonterías, pero me hizo gracia ver la forma en que iban saliendo todas estas cosas.


    Y, antes de acabar, un apunte final. Visto cómo acaba "Las aventuras de Tintín. El secreto del unicornio", tiene toda la pinta de haber segunda parte (supongo que siempre que ésta recaude la suficiente pasta como para que Spielberg quiera hacer más). Eso sí, para los que conozcan los libros, sólo decir que el final de "El secreto del unicornio" es justo el de "El tesoro de Rackham el Rojo", así que no tengo ni idea de cómo se las apañarán para hacer toda una segunda parte de nuevas. En fin, supongo que habrá que esperar pero, mientras tanto, yo os aconsejo que vayáis a ver esta película antes de que la quiten de la cartelera porque, independientemente de que sea de dibujitos, es mucho más real que otras de acción de verdad y, junto con la última "Misión: imposible", una de las mejores pelis de aventuras que hay ahora mismo en los cines.