TÍTULO: LA BODA DE MI MEJOR AMIGA
DIRECTOR: PAUL FEIG
REPARTO: KRISTEN WIIG, ROSE BYRNE, MAYA RUDOLPH, WENDI MCLENDON-COVEY, ELIIE KEMPER, MELISSA MACCARTHY, CHRIS O'DOWD
DURACIÓN: 122 min.
AÑO: 2011
GÉNERO: COMEDIA
Hace unos años que, con motivo de una serie de producciones cómicas estrenadas con gran éxito -al menos en los Estados Unidos-, se ha repetido en varias ocasiones que, Jude Apatow, el responsable creador / guionista / director / productor de muchas de ellas, es uno de las más prometedoras figuras de la comedia actual. No obstante, también es cierto que, fuera de las fronteras norteamericanas, sus producciones, salvo alguna que otra excepción, no han tenido la enorme repercusión que sí lo han tenido en el mercado nacional. Así pues, aunque "Virgen a los 40 - The 40-year-old virgin, 2005" era una comedia bastante divertida, otras supuestas comedias como "Lío embarazoso - Knocked up, 2007", "Supersalidos - Superbad, 2007" o "Hazme reír - Funny people, 2009" ponían a prueba la paciencia de más de un espectador. Desgraciadamente, "La boda de mi mejor amiga" -que Apatow produce-, cuya tremenda campaña publicitaria se empeñaba en presentarla como una ingeniosa y desternillante réplica femenina a las comedias dirigidas mayormente al público masculino, entra a formar parte de este segundo grupo ya que, ni su historia, ni personajes, ni puesta en escena acaba por dividir la opinión de más de un espectador.
Lillian (Rudolf) es la mejor amiga de Annie (Wiig) desde hace años. Por ello, cuando se promete en matrimonio con su novio, le pide a ésta que sea su dama de honor. Annie acepta encantada, ya que supone una ocupación estupenda para hacer frente a su crisis personal: el negocio que montó con un ex-novio se arruinó, su actual pareja sólo la quiere para practicar sexo, y no consigue alcanzar la estabilidad que necesita. Sin embargo, cuando conoce a la esposa de uno de los mejores amigos del novio, Helen (Byrne), da comienzo una especie de disputa entre ambas por ver quién es más apreciada por la novia, o quién se esfuerza más para que Lillian tenga la boda de sus sueños, cosa que acabará ocasionando dolores de cabeza a más de uno, incluido un policía local, Nathan (O'Dowd), que está enamorado de Annie.
En "La boda de mi mejor amiga" las protagonistas absolutas del film no son las protagonistas. Ni siquiera la preparación de la boda de su amiga. En el film dirigido por el televisivo Paul Feig, el protagonismo lo tienen las situaciones que se dan en cada uno de los episodios en los que se podría dividir la película y que, en cierto modo, parodian algunos de los aspectos más criticados por el público femenino, o que muestran diversas situaciones comprometedoras e, incluso, grotescas en las que más de una se ha visto envuelta. Ello explica, en cierto modo, el éxito arrollador que ha tenido el largometraje entre el público americano. Cierto es que, en Norteamérica, las ceremonias nupciales suelen cumplirse con algún que otro ritual previo al enlace que, aquí en el viejo continente, nos es prácticamente desconocido por lo que, al público europeo, le cuesta identificarse con estas situaciones y, por consiguiente, encontrar divertidas muchas de las supuestas bromas de la película.
De hecho, a excepción de alguna que otra secuencia inspirada (la provocación de la cuñada de la novia a un agente de policía a bordo de un avión, o la forma que tiene Annie de llamar la atención de Nathan después de rechazarlo), el resto no deja de ser una acumulación de chistes fáciles sin demasiada gracia, y momentos de supuesta comicidad dirigida muy particularmente al público femenino que esté visualizando el largometraje. Por otra parte, la duración de la película -supera por poco las dos horas- resulta excesiva a todos los niveles, hecho que puede llegar a crispar la paciencia de más de un espectador.
En resumidas cuentas, "La boda de mi mejor amiga" es un film ideado y dedicado casi por entero a las mujeres que quieran pasar un rato más o menos entretenido. En cuanto al público masculino, puede llegar a sentirse muy podo identificado (los hombres son retratados o como oportunistas, o como cerdos machistas o, incluso, como tontainas engañabobos), y aburrirse con la película. En definitiva, es una propuesta con la evidente intención de divertir al sector femenino cosa que, dicho sea de paso, es un objetivo de lo más respetable.
Prometo que no quiero sonar como el típico machista, pero "La boda de mi mejor amiga" es una película de tías para tías. Así de sencillo. En el 99% de los casos, quien no cumpla con esta condición, se aburrirá como una ostra con esta peli, no entenderá como ha podido hacer tanta pasta (al menos los EE.UU), ni qué demonios les hace tanta gracia a las mujeres de este petardo. La película no es mala, pero es un bodrio. Los supuestos gags no hacen gracia (la "gorda" provocando a un policía para que la cachee, la madre de familia salidorra desesperada por cascarse la fiesta de su vida...), las situaciones que deberían ser divertidas son una mamonada brutal (cuando Annie se "coloca" por mezclar whisky con un tranquilizante dentro de un avión, o como cuando pone a caldo a cada persona enamorada que entra en la joyería en la que trabaja), y los momentos que se supone que quieren transmitir mensaje dan pena (Annie vuelve a hacer tartas, como metáfora a rehacer su vida... oooohhh, qué bonitooooo...). Y todo ello, por no hablar de los trozos que se alargan más que un chicle mascado, y que te ponen nervioso de pura tontería, como cuando Annie y la tía buena se pelean para ver quién es más amiga de la que se casa, delante de todos los invitados, o cuando Annie se desquicia y empieza a querer romperlo todo de la recepción en el palacio en el que celebran la fiesta -os juro que las piernas se me movía solas-.
Luego, está ese supuesto momento en que quieren poner a parir a los tíos. ¿Y qué se les ocurre? Pues nada mejor que hacer que los únicos hombres que salgan sean los siguientes (por orden): un gilipollas que sólo se interesa por la protagonista como follamiga, un marido empanado porque vive en un mundo perfecto de color de rosa porque su mayor ambición en la vida era casarse y tener hijos, un policía que quiere salir con la protagonista y que, como es buena persona, la tipa pasa de él como de la mierda... En fin, como veis, todo de lo más normal del mundo. Aunque, para mí, que cuando los hombres normales vieron de qué palo iba la peli, salieron escopetados y, por eso, han tenido que conformarse con éstos.
Lo único que me hizo gracia de la peli es un momento en el que les da una indigestión por haberse atiborrado de carne estilo brasileño y, en mitad de la prueba del vestido de las damas de honor, la que no se pota encima -o encima de otras... y esto va en serio-, se recaga encima. En serio que es lo único más divertido, porque el resto es un pestufo tremendo. Comprendo que también tienen que haber pelis hechas exclusivamente para contentar al sector femenino (aparte de las chorradas de "Crepúsculo", que ahí ya estaríamos bajando la edad hasta los quince años -reales o mentales-). Yo, cuando escuché hablar de "La boda de mi mejor amiga", pensé que sería algo así como la versión femenina de cualquiera de las dos partes de "Resacón en Las Vegas", y no negaré que tenía cierta curiosidad por verla y por echarme unas risas. Pero, después de verla, me temo que sólo le gustó a mi chica porque, según ella, tiene situaciones de mujeres de lo más reales que hay. Bueno, pues no sé si son reales o no, pero lo que sí sé es que yo me aburrí como una oveja. Así que "La boda de mi mejor amiga" es una opción cojonuda si eres mujer, tu pareja está viendo el fútbol o con sus amiguetes, y tú te quieres distraer un rato. Ahora bien, consejo para los tíos: no perdáis el tiempo, que es un bodrio y, por si no fuera poco, el tostón dura más de dos horas. ¡Para morirse!
1 comentario:
Película simpática y punto.
Alejapendeja
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